En la era de la ganadería inteligente, el control y la trazabilidad dejaron de ser solo una obligación: hoy son una ventaja competitiva.
El manejo individual mediante caravanas permite a los productores obtener una visión integral del rendimiento de cada animal, y con eso, maximizar la rentabilidad del negocio.
Identificación individual: del dato al resultado
Las caravanas electrónicas no son simples elementos de identificación: son una herramienta estratégica para analizar la rentabilidad animal por animal.
Gracias a este sistema, se puede registrar toda la información productiva y económica del ciclo de vida de cada bovino, conectando datos que antes quedaban dispersos.
Costos directos individualizados
Con la identificación individual, el productor puede asociar todos los costos y rendimientos específicos de cada bovino:
- Alimentación: detalle de raciones, tipo de pastura y cantidad consumida.
- Sanidad: registro de vacunas, tratamientos y antiparasitarios.
- Mano de obra y servicios: costos de domadores, traslados y otros servicios específicos.
Atributos productivos y trazabilidad económica
Cada caravana se convierte en un pasaporte digital del animal.
Ahí se registran datos como:
- Peso al destete, ganancias diarias y genética (madre, padre, raza).
- Fechas clave: nacimiento, destete, preñez y venta.
- Asociación automática de todos los costos (alimentación, sanidad, manejo) con los ingresos de venta.
Esto permite obtener una trazabilidad económica completa, algo impensado hace unos años en la gestión ganadera.
Decisiones basadas en datos reales
“El principal diferencial de un sistema como Albor Campo es la capacidad de tomar decisiones fundamentadas en datos reales y precisos”, destacó Álvaro Figueras, Líder de Equipo de Control de Gestión de Albor.
Con esta tecnología, los productores pueden:
- Detectar animales más rentables y los de menor eficiencia.
- Optimizar la selección genética y los planes de alimentación.
- Controlar los costos con precisión, identificando gastos y retornos.
- Reducir pérdidas por errores de registro o duplicaciones.
Adaptable a cualquier escala
El sistema puede implementarse en todo tipo de establecimientos ganaderos, desde pequeñas unidades hasta grandes empresas con miles de cabezas.
Funciona tanto en cría, recría, invernada, cabaña o ciclo completo, adaptándose a la realidad de cada productor.
Caso real: eficiencia al servicio del Feedlot
Un establecimiento de invernada con 1.200 cabezas incorporó caravanas electrónicas para registrar la alimentación, sanidad y evolución de cada animal.
El resultado fue contundente:
El productor pudo calcular automáticamente la rentabilidad por cabeza y por lote, ajustar dietas, detectar animales de bajo desempeño y optimizar la rotación de corrales.
“Esto le permitió aumentar la eficiencia general del Feedlot”, agregó Figueras.
En resumen
El manejo individual mediante caravanas no solo mejora la trazabilidad, sino que transforma los datos en decisiones rentables.
Cada animal deja de ser un número y pasa a ser una unidad de negocio medible y optimizable.
En un contexto donde la eficiencia es clave, Albor Campo se posiciona como el aliado estratégico del productor moderno.